Juan Francisco De Jesús Clerico Avendaño
El mundo de la construcción tradicional se ha visto revolucionado desde la aparición del drywall como una opción mucho más económica y que cubre un enorme abanico de ventajas
DAT.- Hablar de drywall es hacerlo de un material de construcción fácil de instalar, duradero, práctico, económico y reparable utilizado para crear ya sea paredes o techos. Es un método constructivo alternativo en sí mismo conocido como placa de yeso, draibol o durlock, y consiste en un panel hecho de yeso envuelto entre hojas gruesas de papel de revestimiento y soporte.
De acuerdo a Juan Francisco De Jesús Clerico Avendaño, presidente de VINCCLER, este es un sistema muy resistente que ha revolucionado el concepto de construcción convencional y que presenta varias ventajas.
La primera vendría a ser que puede tener un acabado similar al del ladrillo y el cemento, sin requerir agua o arena, y generando ahorros de 15% o más en cuanto a gastos. La segunda sería que, al estar compuesto por placas de yeso, cemento y fibrosilicatos, no es combustible y se tiene por seguro para prevenir incendios.
Por otro lado, los constructores destacan que con este material se toma menos tiempo, que es de rápida instalación y que cuenta con aislamiento térmico y acústico. También resaltan que el drywall posee carácter antisísmico porque es liviano y está hecho con estructuras flexibles, lo que significa que no colapsa, se mueve con el sismo y vuelve a su posición original.
Asimismo, con este material se pueden construir paredes completas en tan solo un día, y se estima que es de cinco a ocho veces más rápido de colocar que los métodos tradicionales. También se puede cortar con facilidad para ajustarlo al espacio en la pared o el techo. Además es resistente a la humedad y permite trabajar con tuberías y desagües en las áreas de los baños y cocinas.
Ah, y una ventaja muy importante: ¡Es asequible!
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Hablan los detractores
Los partidarios de la construcción con materiales convencionales alegan que el drywall no es tan duradero, especialmente si se usa en áreas con mucho tráfico.
Señalan que es menos resistente a los impactos y al abuso.
Otros alegan que es difícil de reciclar y en la mayoría de los casos sus desechos terminan en vertederos, lo que hace que este material no sea visto por algunos como ecoamigable.
(Con información de Juan Francisco De Jesús Clerico Avendaño)