Cómo hacer un árbol genealógico: seis consejos
Elaborar un árbol genealógico es un proyecto creativo que muchas personas realizan en algún momento de su vida. Es una propuesta que tiene un alto valor afectivo. Posee un hilo conductor que une el pasado y el presente a través de la historia vital de los seres queridos. ¿Cómo crear un árbol genealógico? En Formación y Estudios te damos seis consejos.
Contenido
1. Establece objetivos
Un árbol genealógico es un proyecto que puede ampliarse hasta mostrar una descripción muy detallada del pasado familiar. A su vez, sus ramas se siguen ampliando por medio de la incorporación de nuevas historias. ¿Quieres concentrarte en el proceso a largo plazo o deseas conseguir objetivos más sencillos? Establece un propósito, aquel que quieres materializar al finalizar la investigación.
2. Crea una lluvia de ideas con los datos principales
El árbol genealógico enmarca los nombres de personas que forman parte de la historia familiar. Todos ellos componen un grupo que, en el contexto de un árbol genealógico, se representa de forma sistémica. Pero también puedes detenerte a nivel particular en la presentación de cada persona. Existen algunos datos relevantes que puedes hacer constar en el árbol genealógico como, por ejemplo, el día de nacimiento. La relación de parentesco es visible en la estructura de un árbol que muestra diferentes vínculos afectivos como, por ejemplo, padres, hermanos, abuelos, hijos, primos, tíos…
3. Encuentra información para elaborar el árbol genealógico
Este proyecto puede darte la oportunidad de mantener conversaciones inolvidables con otros seres queridos que comparten contigo anécdotas e historias. Del mismo modo, también puedes redescubrir antiguas fotografías que aportan un viaje afectivo más allá del tiempo y la distancia. Esas fotografías contienen la memoria de algunas de las personas que vas a incluir en las ramificaciones del árbol.
Busca varias fuentes de información para documentar tu proyecto: contrasta, corrige y corrige los pequeños errores. Los documentos que pueden aportar datos de valor para la elaboración de una historia familiar son muy diversos. Por ejemplo, algunas personas guardan las esquelas de los familiares fallecidos.
4. Hazte nuevas preguntas
El inicio del proyecto comienza con un propósito. Antes de empezar a realizar la composición, es recomendable planificar las bases del ejercicio. Por ejemplo, selecciona las fuentes de información, define tus objetivos más importantes y establece un horario de tiempo para centrarte en la tarea de sumar nuevos datos contrastados. Pero es probable que, durante la investigación, te surjan nuevos interrogantes. En definitiva, intenta encontrar nuevas respuestas.
5. Creatividad
La estructura de un árbol genealógico que cuenta con diferentes ramificaciones muestra un hilo conductor que puede ayudarte a organizar los nombres y datos vinculados con cada persona especial. Sin embargo, más allá de las recomendaciones habituales, desarrolla tu creatividad. Personaliza el proyecto con tu propia perspectiva.
6. Anota la información de valor
Si elaboras un árbol genealógico extenso es posible que atravieses periodos de aparente estancamiento. Momentos en los que parece que la información ya ha llegado a su límite. Sin embargo, si perseveras y sigues atento a las oportunidades que te brinda el entorno de descubrir nuevos datos, es probable que descubras nuevas pistas para seguir investigando.
Elaborar un árbol genealógico es un proyecto que puede desarrollarse de manera profesional como muestra el trabajo de un genealogista que se adentra en temas relacionados con la historia. Pero es un tipo de proyecto que, actualmente, muchas personas realizan durante su tiempo libre para conectar con el legado de seres queridos que dejaron una huella visible.
Observa la propia esencia de los árboles que expanden sus ramas en la naturaleza. Pues bien, esa imagen es una metáfora que adquiere un significado afectivo en el proyecto que hemos comentado.