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Publicado por Emprendimiento en

5 consejos para hacer una exposición oral: ideas clave
Es importante entrenar las habilidades para hablar en público porque intervienen en diferentes experiencias académicas y profesionales. Por ejemplo, quizá en algún momento hagas un examen oral, defiendas la tesis doctoral, realices una conferencia o lleves a cabo una presentación. En Formación y Estudios te damos cinco consejos para hacer una exposición oral.

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1. Ensaya y prepárate para ese momento

Antes de que llegue la fecha de la exposición oral, dispones de unos días o unas semanas, en función del contexto, para planificar con éxito ese objetivo. Por ejemplo, redacta los puntos principales de tu exposición por escrito. Y ensaya la presentación por medio de la lectura del texto. Cuando llegue el momento clave, es esencial que no te limites a leer de manera literal cada palabra del guion que has elaborado.

Sin embargo, los ensayos previos te ayudarán a ganar fluidez en la comunicación de las ideas principales. Puedes ensayar en soledad. Para ello, relee el texto en voz alta, de este modo, te escuchas a ti mismo. Pero quizá puedas contar con la colaboración de alguien de confianza en momentos puntuales. En ese caso, pídele que te dé su opinión sobre los aspectos que puedes cambiar o mejorar.

2. Cíñete al tiempo previsto

El propósito de realizar una excelente presentación en público no debe derivar en el deseo de expresar más datos de los que el tiempo permite de manera objetiva. Es probable que, cuando acudes a una conferencia o a una reunión de trabajo, valores la puntualidad en el comienzo y finalización de esta propuesta. Pues bien, traslada ese ejemplo al contexto de una presentación oral. Infórmate sobre el tiempo del que dispones para exponer las ideas principales.

3. Visualízate en el lugar en el que se va a desarrollar la exposición

Si ya has realizado otras exposiciones orales, puedes apoyarte positivamente en el valor de tu experiencia previa. En ese caso, conoces las claves de ese proceso y puedes corregir algunos errores previos. Si te preparas para un reto exigente, no solo puedes ensayar la exposición durante el tiempo que consideres oportuno. ¿Conoces cómo es el lugar en el que se va a desarrollar el acto o puedes visitarlo para observarlo de forma directa? Esa imagen te aporta una visión de contexto puesto que enmarca la localización.

Por ejemplo, puede ayudarte a identificar la perspectiva en la que estarás situado cuando lleves a cabo la presentación. Si no puedes acceder a esta información hasta el día de la exposición, acércate hasta el entorno de las instalaciones. Es positivo que te familiarices con el lugar.

4. Planifica el inicio y el cierre de la exposición oral

Si vas a realizar una exposición oral, es recomendable que te centres en aportar valor por medio del desarrollo del tema. Sin embargo, la presentación también muestra dos momentos clave: el inicio y la despedida. Pues bien, quienes reciben la información, al estar presentes en la sala, recuerdan con especial claridad el final. Intenta ser breve y sintetizar una idea principal sin dar más rodeos.

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5. Comunica con el lenguaje corporal

La exposición oral, como indica el término, pone en valor la palabra, el tono de voz y el mensaje expresado por medio de la comunicación verbal. Sin embargo, la comunicación va más allá de aquello que el orador dice ante los asistentes. El lenguaje corporal se integra en el contexto de una exposición oral.

¿Pero cómo tomar conciencia de los aciertos? ¿Y cómo reconocer los posibles fallos que es mejor corregir? Por ejemplo, es esencial no gesticular en exceso durante la presentación de una idea. También conviene tener cuidado con aquellos gestos que se repiten con mucha frecuencia.

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